Son muchas las personas que nos están consultando estos días la posibilidad de abrir un ecommerce (para ya, a ser posible) dada la situación económica actual. Y es una decisión acertada, por supuesto, pero la realidad no tiene nada que ver con la rapidez en hacerse ricos que los "gurús" están haciendo creer por ahí.
Si así fuera... no estarían dando cursos de cómo "forrarse" y estarían viviendo la vida loca, o prometiendo posicionamientos exitosos y sin límite por 300€ al año... Cualquier profesional del SEO, serio, sabe que eso es imposible. El desconocimiento de la gente y los caraduras hacen que esta frase sea la normal para muchos dueños de tiendas online: mi tienda no vende.
Para que una tienda venda, tienen que trabajarse muchos factores distintos. Uno de ellos es el posicionamiento (eso si ya se parece en Google, claro). Son ya varios los clientes que venían de otras empresas (algunos han pasado por 3 y 4), que habían contratado para posicionar sus tiendas y en ninguno de los casos lograron nada... porque les cobraron y no hicieron nada, las cosas como son, ni lo más mínimo. Es que eso supone trabajar, claro...
El SEO es caro. Punto. ¿Por qué? Porque los expertos en SEO tienen que luchar de continuo contra tu competencia y contra Google. Para vivir de un posicionamiento, hacen falta unos 18 meses por lo menos. ¿Quieres que tu tienda venda? Pues necesitas una estrategia SEO que vaya de la mano con una estrategia de marketing online. Todo lo demás es gastar dinero para nada. Si crees que vas a abrir una tienda ya y a vivir de ello, te estás engañando. Internet no funciona así y mucha gente se ha dado cuenta de la peor manera: estrellándose. Pero hay otra manera de arrancar el negocio de manera más asequible y un poco más rápida, ¿cuál?... Pues eso te lo diremos tras estudiar tu situación, claro. No hay métodos que valgan para todo el mundo. Cada caso es un mundo.
Podríamos estar diciendo que con nosotros te irá mejor que con nadie por muchas razones. Pero no lo vamos a hacer. Preferimos, si quieres, ponerte en contacto con nuestros clientes de ecommerce y que ellos hablen por nosotros. Sus historias y experiencias quizá te ahorren disgustos y dinero. ¿Hablamos?
