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Cómo crear una marca personal

Espero que sepas qué es una marca personal, porque de eso vamos a hablar hoy, de comunicar con tus atributos personales.


Quizá creas que esto no va contigo, pero todo el mundo tiene marca personal: es la manera en que te percibe la gente. Puede que la tuya sea aleatoria y no seas consciente de ella, pero hay gente que decide que quiere que su negocio crezca poniendo su cara por delante como parte de una estrategia de marketing. ¿Cuál es tu caso?


Como en una marca empresarial, con tu marca personal buscas lograr más credibilidad y que te vea más gente, para que sea la gente quien te busque a ti y no al revés.

Cuando uno se crea un nombre en un sector, puede cobrar sus servicios más caros y esto es así. Además, te permite elegir con quién trabajas y con quién no, porque tu reputación va por delante, así de claro.


Lo primero que tienes que tener claro es si vas a trabajar la marca de tu negocio o tu marca personal. También te digo que lo primero es más caro que lo segundo porque tú ya estás creado como individuo y la marca de un negocio hay que crearla y darle personalidad propia.


No será el primer caso de personas que montan un negocio estando solas y descubren que les va mejor como ellas mismas que como negocio. El tema del personal con el que se cuenta influye bastante.


Y si decides que quieres una marca personal, ahora tienes que decidir qué priorizar, por ejemplo:

-Que quien ya te conoce sepa realmente lo que haces

-Transmitir la confianza que ahora nadie ve en tu negocio

-Que te tengan como referente en tu sector para que te inviten a eventos, etc.


En una segunda fase, si ya te has decidido por darle tu impronta personal al negocio, tienes que comenzar a pensar y a apuntar en qué te vas a diferenciar del resto y qué quieres destacar. Igual estás trabajando ahora mismo y nunca te has parado a pensar en esto. Quizá descubras aspectos de tu negocio que no has explotado aún, que es lo más normal en los pequeños negocios. Y en esta tarea de destacar cosas:


-Quizá quieras destacar tu trayectoria como profesional del sector

-Puedes potenciar tu manera de ser, tu estética y tus valores

-Hacer énfasis en tu manera de hacer y ver las cosas

-También puedes remarcar algo que tú ofreces y el resto no

-Destacar casos de éxito

-Centrarte solo en un tipo de público o de necesidad


Y como no hay dos sin tres, tienes que saber a qué tipo de gente a la que te quieres dirigir. Este punto, también llamado del cliente ideal, es fundamental, pero la gente pasa de pensarlo y se limita a vender a quien llama a la puerta sin más. Claro, luego viene el problema de querer hacer publicidad y que no funcione, pero allá tú.


El público lo definiremos según el objetivo que tengas y en qué quieras diferenciarte del resto. Esto te pasa a ti todos los días. No hablas igual a un tipo de persona que a otro. Pues eso.


Volvemos a insistir en que luego tendrás que decidir el tono y el tipo de mensaje en el que te vas a comunicar según tu público, porque si no, puedes acabar con personalidad múltiple en un psiquiátrico y que tus clientes acaben en el mismo sitio contigo.


A la hora de transmitir tus mensajes, sabiendo a quién van dirigidos, ya podrás hacer mención a lo que mejor se te da, a casos de éxito, a problemas que has resuelto para tus clientes, por qué tu manera de hacer es mejor que la de otros, etc. Será entonces cuando esos mensajes conecten con la gente.


No es lo mismo dirigirse a gente que hizo E.G.G. que a las víctimas de la E.S.O. que escucha reggaetón para que veas cómo influye este tema.


El cuarto paso será decidir dónde te harás visible cual nave Klingon de Star Trek, que no es necesario estar en todas, recuerda, solo en las que tu público esté presente.


Como ya hemos contado muchas veces: tienes que saber cuáles son tus límites y fobias a la hora de comunicar antes de decidirte a aparecer en vídeo, fotos, ir a eventos (importante para tu marca personal), escribir mails, hacer un podcast, etc.


Si lo vas a hacer tú, no te metas en canales donde no vas a poder hablar en el mismo lenguaje de ese canal, es decir, no te abras un canal de YouTube si no vas a salir en vídeos, por ponerte un ejemplo. Eso es vital antes de dar ningún paso al respecto. Elige lo que mejor domines.


Y, por último, todo esto ha de traducirse en movimiento: hacer cosas para que pasen cosas. Según contrates a alguien o no, según qué límites te pongas o fobias hayas desarrollado a lo largo de tu vida, podrás lanzarte a la piscina y:


-crear un blog donde publicar contenidos sobre ti y lo que haces

-participar en entrevistas o crear artículos para webs que no son la tuya

-colaborar con otros profesionales de tu sector en vídeos o artículos

-crear webinars a través de tu web o de plataformas de streaming

-organizar o participar en talleres y presentaciones

-aparecer en directos en redes sociales, etc.


Todo no vas a poder hacerlo si eres solo una persona en tu negocio, eso tenlo claro. La idea es priorizar siempre qué hacer, dónde y cada cuánto. Sí, como te conozco, sé que tiempo no te sobra precisamente, así que mejor ser realistas, ¿no?


Como ves, es el mismo planteamiento que se realiza para una empresa cualquiera, donde también hay que buscar una cara visible.


Lo importante es encontrar el método que mejor va contigo y que puedas mantener en el tiempo. Aléjate de gurús y coaches milagreros… y confía en equipos de profesionales para orientarte.


Lo que sí te vamos a recomendar es que conviene gastar dinero en fotografía profesional para ti y para tu web de negocio. Tu marca tiene que representar lo que tú eres, es decir, con tus imperfecciones y tu naturalidad.


No hace falta que hables de tu vida personal, pero sí de cómo ves tú las cosas en realidad respecto a tu sector de negocio. Ahí ya podrás contar tus casos de éxito e incluso fracasos y lo que aprendiste de ellos.


crear una marca personal

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