Tan importante es hablar bien como escribir bien. Escribir bien es “cool”, atractivo, bueno, elegante… Escribiendo bien, podrás seducir a tu cliente. Le tienes caer bien. Cualquier venta es una seducción. Y recuerda, el cliente es el que paga, no el que consume (a veces coinciden en la misma persona, pero no siempre).
Hay gente que le da igual escribir con faltas, pero a quien sí tiene esa cultura, le molesta muchísimo ver una falta de ortografía. Si lo haces bien, no pierdes a ninguno y gusta a todos. Da igual el canal en el que escribas. Por favor, corrige, lee dos veces, mira los espacios entre palabras, etc.
Sé breve y claro. No seas pesad@. Vete directo al grano. Una idea en una frase o párrafo. No mezcles mil ideas en un mismo párrafo. Frases o párrafos cortos. No metas “rollos” a la gente.
Y no te olvides de ser cercan@, claro. Hoy día no hay contextos en los que hablar de usted a un cliente. Imagina que en redes se te ocurre hablar de usted… ¡no! Se agradece el acercamiento, no lo olvides.
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